El hijo de Yiya Murano subastará la vajilla que ella usó para envenenar a sus amigas
La reliquia, que pasó por manos de la asesina y de una amiga, está compuesta por seis tazas, una tetera, una azucarera y un recipiente para la leche. Cuánto han ofrecido por el juego de té.
8 de septiembre de 2023
Martín Murano, hijo de la asesina Yiya Murano, decidió subastar el juego de tazas de té que su madre empleó en 1979 para envenenar a dos amigas y a una prima, a quienes les debía dinero.
Según contó Martín, su madre le regaló la vajilla como obsequio de bodas, pero él no la quiso y se la entregó a una amiga de su madre. Al morir la mujer, la vajilla le fue devuelta. Ahora, busca venderlas para colaborar con un refugio de perros y gatos de Mar del Plata que asiste a unos 50 animales.
Es así que se le ocurrió la idea de hacer una subasta para "convertir algo macabro, siniestro, en algo bueno".
“Yo no me pienso quedar con ni un peso. Esto va para un hogar de perros y gatos de Mar del Plata. La idea es transformar el horror de esas tazas con las que mató en algo solidario. En llenar un camión con alimentos”, señaló Martín.
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A pesar de que María de las Mercedes Bolla “Yiya” Aponte de Murano murió en 2014, siempre se supo que no tuvieron buena relación y por este motivo, junto con la historia que había detrás de las tazas, Martín había decidido regalar la vajilla. Sin embargo, un amigo le sugirió que las subaste y done la plata al refugio que apadrina.
Al ser consultado sobre cuánto dinero espera recaudar con la venta de los objetos, contó que su objetivo son aproximadamente 12 mil dólares.
Para ofertar por el juego de té hay que enviar un mail a [email protected].
Quién fue Yiya Murano, la "envenenadora de Monserrat"
La mujer fue una prestamista que se convirtió en la primera asesina en serie del país. Fue acusada y condenada por al menos tres cargos de homicidio y estafas, por los que estuvo presa durante 16 años.
Las víctimas comprobadas de Murano fueron Carmen Zulema del Giorgio de Venturini, su prima segunda, quien le había entregado dinero a Yiya para que lo “invirtiera”. Ante la falta de ganancias o devolución, comenzó a exigir que apareciera algo de lo que había invertido. Lo mismo sucedió con Nilda Gamba y Lelia Elida "Chicha" Formisano de Ayala, vecinas y amigas de la asesina.
La primera víctima fue Nilda, quien visitó a Yiya y comenzó a sentirse mal, por lo que la dueña de casa le preparó un té en una de las tazas que hoy se vende, que habitualmente no utilizaba. Allí le dio cianuro. La mujer intoxicada falleció un día más tarde.
Luego de la autopsia, se pudo verificar que las tres víctimas habían sido envenenadas con cianuro.