La emoción y las lágrimas de Paulo Dybala en su despedida de la Juventus

Después de casi siete años y casi 300 partidos, Paulo Dybala se despidió el lunes de la camiseta bianconera en su último partido como local de la Juventus.

Fue ovacionado a los 77 minutos en el 2-2 ante Lazio y dejó la cancha entre lágrimas y una gran conmoción. Se abrazó con todos, saludó, firmó autógrafos y se sacó selfies ante los tifosi que lo aplaudieron.

De cara a la finalización de su contrato, el cordobés había compartido el fin de semana una car a modo de despedida del club y sus hinchas: "Es difícil encontrar las palabras adecuadas para saludarte, son muchos años y muchas emociones de por medio, todo junto... Pensé que estaríamos juntos aún más años, pero el destino nos pone en caminos diferentes", expresó Dybala en un hilo de Twitter.

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"Nunca olvidaré todo lo que me hiciste vivir, cada partido, cada gol. Contigo crecí, aprendí, viví y soñé. Han sido 7 años de magia, 12 trofeos y 115 goles que nadie nos quitará. Nunca", remarcó. 

Agradeció el apoyo "en momentos difíciles", y a todos los que lo acompañaron a lo largo de los años. "Desde el primero hasta el último, desde la afición hasta la gente que trabaja en el club, a todos, entrenadores y compañeros, empleados y directivos", dijo. 

Y destacó que "lucir esta importante camiseta junto con el brazalete de capitán ha sido uno de los mayores orgullos de mi vida, que espero poder mostrar algún día a mis hijos y nietos".

"Es difícil de imaginar, pero será nuestro último adiós. No será fácil, pero entraré al campo con una sonrisa y la frente en alto, sabiendo que lo he dado todo por ti", culminó.

El domingo el Dybala tendrá su último partido como visitante ante Fiorentina. El futuro del delantero es aún una incógnita, en medio de versiones que hablan de que podría irse al Inter, Barcelona o Atlético de Madrid, Tottenham o Arsenal.

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