Piojos y liendres: mitos y verdades sobre su contagio y tratamiento más eficaz

¿A quién no le pasó de haberse contagiado de piojos, por ejemplo, en la escuela? Sentir una enorme picazón en el cuero cabelludo producto de los piojos y liendres que lastimaban la piel y el pelo. ¿Quién recuerda el peine fino y las lociones con olor parecido al vinagre?

Lo cierto que la pediculosis es un problema bastante frecuente en chicos y chicas que se encuentran en edad escolar. Es así que si una persona identifica piojos o liendres (a sí misma o en la cabeza de un niño/a), lo ideal es "consultar al médico sobre el tratamiento más adecuado para eliminarlos. Lavar la ropa, las sábanas y los peines con agua caliente. No usar sustancias que pueden ser tóxicas. El vinagre ayuda al desprendimiento de las liendres del pelo", extiende un informe del Ministerio de Salud de la Nación Argentina.

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En esa línea, y para ahondar en este tema de gran relevancia, en el aire de Médico de Familia contamos con la presencia de Claudia Vassena, licenciada en Ciencias Biológicas, investigadora del CONICET y directora del Centro de Investigaciones de Plagas e Insecticidas. "No hay que estigmatizar al niño que tiene piojos", destacó.

"Los piojos son insectos que tienen una particularidad, no tienen alas. Cuando uno se contagia, es porque hay contacto muy cercano de una persona con otra. Tienen unas patas que tienen una forma muy adaptada para agarrarse del pelo. Los chicos se ponen cabeza con cabeza y es ahí dónde se contagian ... Es un mito que cuando van a pileta se contagien en el agua. También es un mito que se contagian en los areneros", precisó la especialista invitada.

Mirá el informe completo en el video.