El dolor de la madre de la joven que murió al caer de un colectivo: "Dejó su última huella de amor"
Isabella tenía 18 años y murió en un accidente que tuvo el pasado 7 de febrero. Su mamá donó sus órganos para salvar la vida de otras personas.
10 de febrero de 2022
Una joven de 18 años murió tras caer de un colectivo en movimiento. Ocurrió en la ciudad de Berisso (La Plata, PBA). Su nombre era Isabella Marino. Ella era oriunda de la localidad de Gaiman (Chubut), pero se había mudado a la capital bonaerense para estudiar veterinaria en la Universidad Nacional de La Plata (UNLP).
Según investigaciones, la estudiante había subido al transporte público y, al ver que no era el correcto, atinó a bajarse para redireccionar su recorrido. Al tratar de bajar, cayó fuertemente y golpeó su cabeza contra el suelo. Una cámara de seguridad que se encontraba en la cercanía del accidente documentó las fuertes imágenes.
Tras el fallecimiento de Isabella, su mamá la despidió con mucho dolor. A través de un posteo en la red social Facebook, le expresó todo su amor y cuánta tristeza siente tras su partida. "Tenemos el alma en pedacitos ... Nada en el universo puede devolvernos a la personita más especial, distinta, honesta, fresca, alegre, apasionada, COMPAÑERA, curiosa y tantas, pero tantas cosas más", inició Carolina Jones.
Luego, y después de una fuerte despedida a su hija, adicionó: "Quiero contarles que no quiso irse de este plano sin dejar su última huella enorme de amor". Así fue como contó que donó los órganos de Isabella para lograr salvar la vida de otras personas.
"Como última tarea, Isa le devolvió la vida a una mujer de 37 años y a dos hombres de 39 y 49 años, quienes recibieron en forma directa e inmediata órganos que les permitirán seguir viviendo", precisó, muy conmocionada, Carolina en redes. "Muchas otras personas salvarán su vida o mejorarán con esta decisión que tomamos teniendo la absoluta seguridad de que es lo que ella hubiera querido", sentenció.
