Caso Báez Sosa | Así fue el accionar de los rugbiers, la madrugada del crimen de Fernando
Videos grabados por testigos captaron todos los movimientos de los ocho imputados. Se trata de un material que presentó el doctor Fernando Burlando en los alegatos del juicio por el Crimen de Fernando Báez Sosa.
26 de enero de 2023
Los alegatos expuestos por parte de Fernando Burlando, abogado defensor de la familia Báez Sosa, duraron cerca de 10 horas. En dicha jornada del 25 de enero, se expusieron diversas evidencias contra los ocho rugbiers imputados por el homicidio de Fernando, asesinado en Villa Gesell (PBA) el 20 de enero de 2020, a la salida del boliche Le Brique.
"La imagen de Fernando de rodillas pidiendo clemencia. Esa es la imagen que para esta representación justifica ni más ni menos el pedido de prisión perpetua para los acusados", exclamó el doctor Burlando, en los alegatos expuestos en el Tribunal en lo Criminal Nº 1 de Dolores (PBA).
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"Todos, absolutamente todos, participaron. Todos asesinaron a Fernando Báez Sosa. La responsabilidad de quienes fueron sus ocho asesinos se resume en dos momentos de salvajismo y de horror. Dos instancias, en las que hemos asistido en estas jornadas para sumar una y otra prueba de la descarnada realidad. La cacería humana de la que fue objeto", sumó el letrado.
Y adicionó: "Fernando Báez Sosa, de rodillas, sus manos en el piso y, sin siquiera mirar, levanta su mano y pide contemplación, clemencia. La respuesta fue una patada a la cabeza y otra más, y otra más. Era una bolsa de papas y continuaban castigándolo, pegándole patadas en todo su cuerpo y en la cabeza. Tal vez, estaría en algún momento sin signos vitales, pero insistieron pegándole. Los azotadores estaban ahí cerca, pegados y decidían el momento oportuno para castigar a Fernando a mansalva. Previamente, lo marcaron, lo cercaron, esperaron el momento justo para que se retiren los funcionarios policiales. Una vez rodeado, Fernando Báez Sosa lo atacaron por diferentes flancos. Aunque el ataque clave, en un alto alarde de cobardía, fue el que le impusieron por detrás y absolutamente todos juntos. ¿Cabe alguna, a esta altura del debate, si hubo o no intención de matar? ¿Se puede hablar de incidente o accidente? ¿Se puede hablar de una pelea? ¿Nunca fue amenazado? ¿Emboscado? Evidentemente, no hemos tenido en cuenta cuántos fueron sus atacantes ni el destino que deseaban de ese ataque. La conquista era el trofeo. Celebraron, se abrazaron, comieron hamburguesas. Trataron de borrar evidencia lamiéndose la sangre de su víctima".
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La exposición constó de la recopilación de diferentes evidencias. Desde los numerosos testimonios de los testigos que fueron citados para declarar en el Tribunal, hasta la reproducción de videos que transeúntes grabaron aquella madrugada del crimen de Fernando Báez Sosa. Dichos videos fueron claves para identificar a cada uno de los rugbiers imputados.
El doctor Burlando expuso las imágenes ante el Tribunal y fue así como señaló y ubicó a cada imputado en la escena del crimen. Todos ellos fueron señalados en el material audiovisual mediante diferentes círculos de colores, en un rastreo de movimiento.
