Las contradicciones en las declaraciones de Toto Salvio y Magalí Aravena

El jugador de Boca Juniors, Eduardo "Toto" Salvio, declaró en la tarde de jueves ante la Justicia luego de ser denunciado en una causa por lesiones en contexto de violencia de género. El futbolista no podrá acercarse a menos de 300 metros del domicilio donde se encuentre su expareja, Magalí Aravena, a quien arrastró con su auto luego de mantener una discusión.

También a Salvio se le ordenó abstenerse de mantener contacto con Aravena "por cualquier medio", a excepción de las cuestiones relativas a los hijos en común. En este sentido, se designó a una persona de confianza entre ambos.

Por otro lado, no podrá conducir vehículos por 30 días y deberá dar aviso a la Fiscalía para cuando realice salidas del país, en el marco de sus viajes internacionales por la participación de Boca en la Copa Libertadores. La causa continuará a cargo del fiscal Carlos Caputo.

La declaración de Salvio

El abogado Eduardo Cafferalla, afirmó que su defendido le dijo a su ex pareja en varias ocasiones que "por favor basta, andate, no estamos para hablar", previo a que acelere su auto.

“Después de decirle muchísimas 'veces por favor basta, andate, no estamos para hablar', el levanta su pie del freno y el auto automático se mueve. Cuando el auto comienza a moverse se cuelga del auto. A tal punto que ella concurre al lugar con una amiga que la trata de separar y sacar del auto porque estaba en un estado que estaba totalmente desorbitada", explicó el letrado.

Por otra parte, Cafferalla dio detalles del video que se difundió en las últimas horas: "Quiero que quede en claro que en esa escena que se ve el arranca el auto y ella se cuelga para frenarlo para agredir a una persona que estaba atrás".

Sin embargo, Aravena le contó a las autoridades su versión de los hechos: “Veo que estaba la camioneta del padre de mi hijo y él estaba con la amante”. Su frase hace referencia a Sol Rinaldi, la joven que estaba con Salvio el miércoles por la noche y que subió una foto a Instagram del futbolista haciendo un asado en un balcón.

“Fui hasta el auto y quedé enfrente. Eduardo avanzó como queriéndose ir del lugar, pero yo estaba enfrente, él avanzó como para pisarme, yo llegué a correrme para que no me pisara pero me pasó pegado a las piernas y ahí me agarra el vidrio de atrás del lado del acompañante, arrastrándome hacia delante y luego hacia atrás, hasta que me solté, porque ya no tenía más fuerza. Eduardo dio marcha atrás y se dio a la fuga”, continuó la mujer, que tiene dos hijos con Salvio.