Europa en alerta por la viruela del mono: ¿cuáles son sus síntomas?

 

Este miércoles, España reportó 23 posibles casos de la viruela del mono en la región, y el Ministerio de Sanidad, junto con los gobiernos regionales, activaron la alerta sanitaria.

El primer caso confirmado en el Reino Unido fue ingresado en un hospital el 6 de mayo, se diagnosticó la enfermedad el 12 de mayo, y tres días después se alertó a la OMS de la presencia de varios casos en el país. 

TE PUEDE INTERESAR: Nuevo caso de hepatitis infantil aguda en Argentina: el nene también tuvo que recibir un trasplante

Por otro lado, en Portugal, la Dirección General de Salud  reportó cinco casos de la viruela y mantiene bajo vigilancia otros 15 casos, todos pacientes de "sexo masculino, estables y con lesiones ulcerativas".

En Estados Unidos también se ha detectado un caso. Se trata de un hombre adulto en el Estado de Massachusetts que viajó recientemente a Canadá. Según la información oficial, el caso no representa ningún peligro para el público en general.

 

¿Qué es la viruela del mono?

Es una enfermedad zoonótica muy poco frecuente. Los primeros casos humanos se identificaron en la República Democrática del Congo en 1970. El número de casos en países de África occidental y central aumentó durante la última década.

Fuera de África, se documentaron casos de infecciones humanas en varios países, como en EEUU, Reino Unido, Israel y Singapur. En todos los casos se ha asociado a un caso importado o a contacto con animales importados.

¿Cuáles son los síntomas de la viruela del mono?

Generalmente, las personas con esta enfermedad suelen presentar fiebre, dolor de cabeza, dolores musculares, linfadenopatías y cansancio.

Unos días después de la aparición de la fiebre, se desarrolla un exantema (una erupción en la piel rojiza), que a menudo comienza en la cara y luego se extiende a otras partes del cuerpo. Suele producir una enfermedad autolimitada y la mayoría de las personas se recuperan en varias semanas. Sin embargo, en algunos casos puede producirse una enfermedad grave.